UN FIN DE SEMANA EN PAÍS CÁTARO

La imaginación popular se ha adueñado del catarismo estos últimos años.

El turismo de masa dibuja a trazos gruesos un paisaje que en realidad es todo de marices y sensaciones delicadas.

Los que conocemos la realidad del País Cátaro vemos estas fortalezas abandonadas, estos pueblos dormidos y estas montañas apaciguadas como el testigo de una civilización rica y avanzada.

La belleza de los paisajes corta la respiración, y la Historia graba en el visitante unas sensaciones que nunca se olvidan. 

Montsegur, Puivert, Puilaurens, Carcasona, Queribus, Minerva, Montaillou, Rennes le Chateau, Lastours….Nombres evocadores de unos lugares que una vez visitados nunca abandonarán tu memoria.

Acompañenos en nuestras excursiones en País Cátaro…

 

 

 

 

…En pocos días la niebla esconderá las ruinas de los castillos cátaros un año más. Las piedras que dan testimonio de una de las historias más increíble que conoció, para olvidarla después, la Europa medieval volverán a esconderse en el invierno hasta la próxima primavera.

 

Siempre es tiempo de visitar las rutas cátaras aunque quizás la primavera y el otoño sean la época más propicia, antes de la avalancha turística estival y de las temperaturas veraniegas.

 

El viajero curioso y deseoso de recorrer los senderos conocidos y los más escondidos sólo necesita un par de zapatos resistentes, una mochila para el agua y la cámara fotográfica, en los auriculares canciones de los trovadores adaptadas a nuestros tiempos (hay muchas y muy buenas), y nada más…

 

Nosotros recorremos el país cátaro desde hace muchos años, descubriendo en cada viaje nuevos y ricos lugares. Queremos compartir con nuestros lectores algunas rutas.

 

El siguiente circuito que podríamos llamar “de iniciación” o básico, está pensado como un fin de semana largo desde Barcelona, empezando el jueves por la tarde de manera a que se pueda utilizar esta mañana para venir a Barcelona desde cualquier otro punto de España.   

  

 

JUEVES TARDE

 

  

BARCELONA – CUCUGNAN

 

  

DISTANCIA: 242 KM (2 HORAS)

 

La carretera es buenísima, es autopista casi todo el tiempo. No os paséis la salida 41 de la A9 (Perpignan nord) , luego la D12, D18, D117 (preciosa carretera que bien vale recorrer entera en otra ocasión) hasta Maury. A estas altura el castillo de Queribus está a vuestra derecha, allí arriba. Una vez pasado justo debajo esta el pueblo de Cucugnan, más conocido en Francia por una novela llevada a la pantalla hace 70 años (el cura de Cucugnan).

  

Solemos invertir 2 horas y poco en el trayecto. Recomendamos pasar la primera noche en Cucugnan o bien en Duilhac-sous-Peyrepertuse, algunos kilómetros más allá.

 

Cena y noche en Cucugnan o en Duilhac (5 km)

   

 

VIERNES

 

  

VISITA CASTILLO DE QUERIBUS

 

Puede parecer contradictorio empezar la visita al País Cátaro por el último castillo cátaro en rendirse (en realidad el penúltimo, algún día lo contaremos…).

Existen sin embargo dos razones para ello: la primera es práctica, y es la proximidad de Queribus de la frontera con España, ya que prácticamente nos lo encontramos en el camino.

La segunda razón y a nuestro juicio la más poderosa es que Queribus encierra lo que queda del catarismo en su aspecto, en sus piedras, en el paisaje que descubres desde sus almenas desde los Pirineos hasta el Mediterraneo, con los Corbieres a la espalda, en la Tramontana furiosa que sopla allí arriba un día tras otro.

Queribus por su historia y su localización descubre la esencia misma de esta aventura de la Historia que es la epopeya cátara.

Quizás sólo Montsegur libere esta carga de emotividad tan grande y que retrotrae el visitante al pasado intuido a través de los libros.

 No debemos de olvidar sin embargo que el Castillo de Queribus que tenemos ante (o encima de) nosotros es lo que queda de la fortaleza que entregó Xabert de Barbaira en 1255 a su antes compañero de armas Oliver de Termas, culminando así décadas de esta relación de amor-odio tan característica de la Edad Media entre Señores de mismo rango. El castillo fue inmediatamente remodelada por los ejércitos reales franceses para pasar a ocupar un importante sitio en la línea fronteriza con Aragón.

Pero cuando estamos en la parte baja de la Sala del Pilar sí pisamos suelo cátaro, anterior a la reforma de los ejércitos reales franceses, se ve claramente la diferencia de nivel en los muros: aquí murió El Perfecto cátaro y obispo del Razés Benoit de Termas hacia 1230.

La visita nos llevará un par de horas aproximadamente y seguro que gran parte de este tiempo lo pasaréis escrutando el paisaje, inmersos en esta atmosfera que desprende esta primera etapa más espiritual que histórica.

 Muy cerca nos espera el imponente Peyrepertuse.

 

 

 

VISITA CASTILLO DE PEYREPERTUSE

 

A 11 kilometros de Queribus nos espera una fortaleza impresionante. Desde abajo los muros se mimetizan con la pared rocosa.

El camino rodea la cresta afilada y nos llevará a una de las más emblemáticas citas cátaras. En los años 80 se citaban aquí sectas de adoradores del Sol y otros neocátaros, que oficiaban a veces en la iglesia de Santa María.

Pero para nosotros lo imprescindible es pararse a contemplar los Corbières desde lo más alto de la más alta roca, en el extremo Oeste de la fortaleza.

 Dos horas de visita serán suficiente. Ya toca ir a comer. Y cuidado con la hora, que a partir de las 13,30h (incluso antes) ya no os sirven. Avisados estáis…

  

 

CAMINO DE CARCASONA

 

Aunque apetece una siesta conviene ponerse en marcha cuanto antes para llegar a Carcasona de día. Vamos a cruzar los Corbières, y esto se tiene que disfrutar.

Recomendamos seguir la D14, luego la D613 (siguiendo el río la Sals) , pasando cerca de Rennes le Chateau (vamos a dejar esta visita para otro fin de semana, por sí sola se merece un día. Mientras tanto siempre podéis ir leyendo nuestras publicaciones en la web https://viajescataros.com/ , ver «lugares» y el blog) hasta Couiza, para terminar por la D118 siguiendo el rio Aude que da su nombre al departamento (provincia) hasta Carcasona, su capital. Son 86 km entre montañas y viñas rocosas.

Los Corbières configuran un macizo montañoso que ha sido siempre un lugar de paso para pueblos perseguidos o no, y fronterizo entre países.

La gran cantidad de castillos medievales atestiguan de ello.

Por ello el sentimiento de alejamiento y de soledad que desprenden ciertos sitios (por ejemplo el pueblo abandonado de Perillos, al este, o la zona de Bugarach, entre muchos otros) no deben llevarnos a olvidar que aquí vivieron y pasaron pueblos diferentes, desde los albores de la humanidad (el Hombre de Tautavel), hasta los visigodos.

Por aquí pasaron faydits y cátaros, se escondieron y siguieron en muchos casos hacia el sur y las tierras más acogedoras de Cataluña y Valencia, dejando un fondo de recuerdo cultural colectivo que ha marcado profundamente estas zonas rurales. Pero hoy no tenemos tiempo para entrar en profundidad en el alma occitana, nos espera la perla del sur, la fortaleza que ha capitulado en alguna ocasión pero que nunca ha sido tomada. 

 

 

 

VIERNES TARDE

 

 

CARCASONA

  

http://viajescataros.com/carcasona

¿Qué decir de Carcasona que no se haya dicho ya? La Ciudad medieval se ve desde muy lejos, y ofrece al turista todo lo que se pueda soñar en un viaje de descubrimiento.

Recomendamos aparcar en uno de los parkings cercanos a la Puerta Narbonnaise, entrada principal, y recorrer andando las callejuelas y las fortificaciones, con tranquilidad. No olvidéis la Basílica Saint Nazaire, con la tumba de Simon de Montfort y la Lápida del Sitio de Toulouse.

La visita del castillo condal también es recomendable, y si puede ser con guía mejor, la inversión vale la pena, aunque lo que os vais a llevar de esta primera visita serán ante todo sensaciones.  Y la sensación al dejar Carcasona al día siguiente es que debajo del turisteo inevitable duerme una ciudad culturalmente rica y profundamente orgullosa de su identidad.

A estas alturas ya habréis probado el cassoulet (no confundir el de Carcasona con el de Castelnaudary o el de Toulouse). 

 

  

 

SÁBADO

 

  

CASTILLO DE PUIVERT

 

  

Es conveniente poner el despertador al alba y salir cuanto antes hacia el castillo de Puivert. Una buena idea sería desayunar en Limoux, simpática ciudad famosa por sus carnavales y sobre todo su Blanquette, el brut espumoso más antiguo del mundo, dicen.

Tardaréis una hora aproximadamente para encontraros boquiabiertos frente  a un castillo de los de cuentos de hadas, muy cinematográfico (aparece en varias películas).

 Entramos con este castillo en otra dimensión de la historia de Occitania. Puivert fue lugar de encuentros de numerosos y famosos trovadores (consultar nuestro artículo http://viajescataros.com/los-trovadores/ ).

 Solo faltan los caballeros luchando en un torneo en el patio de armas, o el lago que existía en la Edad Media. El lugar de meditación perfecto es la famosa Sala de los Músicos donde tenían lugar festivales y cortes de amor.

la web del castillo http://www.chateau-de-puivert.com es bastante poco esclarecedora, no tiene traducción y francamente sigue en la línea de los sitios cátaros (salvo Carcasona entre pocos otros…) en cuanto a la calidad de la información por Internet…Nada que no se puede solucionar con un poco de búsqueda o un correo a nuestra web info@viajescataros.com…

 

  

 

SÁBADO TARDE

 

  

VISITA MONTSEGUR

 

 

Seguramente el punto culminante de este fin de semana cátaro. Media hora separan Puivert de Montsegur, y el Pog (Aguja rocosa) aparece intermitentemente allí muy arriba antes de llegar. 

Se puede aparcar cerca del inicio del camino a la cima. 

La subida es fácil aunque conviene tomársela con tranquilidad. El Castillo ha sido posiblemente reconstruido después de su toma por los franceses, aunque no parece haber ninguna evidencia de tal reconstrucción. En cualquier caso imaginemos el “castrum” en su conjunto, pueblo más o menos fortificado agarrado al flanco de la montaña bajo las murallas donde se amontonaron Perfectos, Creyentes y Hombres de armas durante casi 10 meses con la vista puesta en los ejércitos del Rey de Francia abajo en el valle.

 

Deberán subir a las fortificaciones para divisar toda esta parte de los Pirineos, y casi tocar el cielo que creyeron alcanzar los 144 cátaros que bajaron a empujones el camino hacia el Camps de los Cremats (Campo de los Quemados) el 16 de marzo de 1244.

 

El castillo se recorre rápidamente y no es raro encontrarse grupos de diversa índole, filosóficos o religiosos, en contemplación o simple tertulias.

  

El visitante busca también los puntos de entrada y salida del sol del solsticio de verano e imagina las posibles implicaciones esotéricas del lugar. Montsegur conlleva lo que cada uno busca en él, desde sentimientos religiosos a postulados nacionalistas, pero en cualquier caso encierra una fortísima carga emocional al que ni los visitantes más racionales permanecen inmunes.

 El día ha sido muy duro, física y emocionalmente, y nos merecemos una cena en condiciones y una buena noche de descanso.

Si no se ha hecho muy tarde no es mala solución conducir media hora hasta Quillan.

 

  

 

DOMINGO

 

 

PUILAURENS

 

 Nos separa una hora desde Montsegur hasta Puilaurens, ya volviendo por la D117. Una vez en Quillan seguimos el río Aude, cruzando por el desfiladero de Pierre-Lys.

Puilaurens aparece de repente en el cruce con la D22, como sacado de un cuento de hadas. Necesitaréis un par de horas para la visita. Puilaurens (nos cuesta todavía escribirlo con i y no con y , reforma obligada por Francia para diferenciar este Puilaurens de Puylaurens en el Tarn). 

El castillo en su estructura exterior esta muy bien conservado. Fue guardián de la frontera aragonesa durante varios siglos y no le falto importancia .

Quizás Puilaurens no haya dejado en la historia cátara una huella muy profunda pero fue castillo cátaro en el sentido «occitan» de la palabra que sepamos hasta 1245.

Seguramente desde lo alto de la Torre de la Dama Blanca (la conoceréis en seguida) tomaréis un momento para contemplar una vez más los Pirineos tan cerca y tan lejos a la vez, la Boulzane abajo en el valle, el pueblecito difumnado. Aquí vivieron hombre, mujeres, soldados, Perfectos y Perfectas, gente humilde y Señores, y contemplaron en este mismo sitio este mismo paisaje, en un mundo tan diferente del nuestro.

¿Imaginaron en algún momento que sólo nos acordaríamos de ellos gracias a estas piedras que tanto les costó subir allí ariba?

 

   

DOMINGO TARDE

 

  

VUELTA

  

 Al coger una vez más la D117 hacia Perpignan váis a cerrar un fin de semana que a buen seguro os dejará una profunda huella. A la derecha de la carretera las montañas recortadas sobre el horizonte esconden un tesoro: el Fenouillèdes, que ya os atrae como un imán, y al llegar a Saint Paul de Fenouillet de repente en el horizonte, a la izquierda, surge la silueta maciza y arrogante de Queribus. 

Un consejo: no subáis otra vez, aunque vayáis muy bien de tiempo, dejarlo para la próxima visita, y llevaros el recuerdo de las sensaciones allí vividas.

 Dentro de unos días ya tendréis otros nombres en la cabeza: el Cabardés, Minerva, Albi, Rennes-le Chateau, Foix, Montaillou, Fanjeaux, Termas, Aguilar, Opoul-Perillos…

Porque lo que sí es seguro, es que volveréis…

 

 

 

 

 

 

 

Organizamos excursiones de varios días en el sur de Francia, en búsqueda de la Historia Cátara. El recorrido descrito anteriormente es un ejemplo, puede incluir desde transporte hasta guía especializado.

Precio de este viaje desde 642 Euros

consulte fechas, información y reservas: info@senzia-travel.com – +34 626799654